Soy Edisa, ingeniera de formación, líder de proyectos por vocación y vendaval por naturaleza.

No soy calma - soy intensidad, emociones a flor de piel y un torbellino constante de ideas. Durante mucho tiempo pensé que para ser una buena líder debía ser siempre impecable, rápida, resolutiva y estable… hasta que entendí que el verdadero liderazgo nace de la autenticidad, no de la perfección.

Hoy elijo buscar respuestas dentro del caos. Aprendo a liderar desde el corazón, sin dejar de ser pasional, pero también sin perderme en la carrera interminable de hacer, hacer y hacer.

No tengo todas las respuestas, pero tengo algo claro: las mujeres podemos liderar de otra manera. Podemos ser exitosas sin quemarnos, podemos ser sensibles sin ser débiles y podemos construir desde la honestidad.

Este es mi lugar seguro y, si has llegado hasta aquí, tal vez también sea el tuyo.